LOS INICIOS DE LA M.S.P. (MINERO SIDERÚRGICA DE PONFERRADA)

Por aquellos años de 1914 y 18, la Primera Guerra Mundial da origen a una coyuntura sumamente favorable para la minería del carbón. Entonces se fundan en la provincia seis nuevas sociedades. El día 31 de octubre del año 1918, grupos financieros de Madrid y de Bilbao, capitaneados por el Marqués de Aldama y el Conde de los Gaitanes, constituyen la Sociedad Minero Siderúrgica de Ponferrada (M.S.P.) bajo la presidencia de Don José Luis de Ussía y Cubas, con un capital inicial de treinta millones de pesetas.
Previamente a la constitución de esta gran empresa, Don Pedro Ortiz de Muriel, en nombre propio y en el de Don José Luis de Ussía, Don José María de Landaluce y otros, adquiere las concesiones de Don Julio Lazúrtegui y algunas más, totalizando así varios miles de hectáreas en la cuenca lacianiega y agregando a todo ello el berciano Coto Wagner.
Minero Siderúrgica de Ponferrada comienza sus explotaciones en la zona de Villaseca y, constatado que toda la cuenca reserva gran cantidad de buen carbón, decide acometer de inmediato la construcción del imprescindible ferrocarril entre Ponferrada y Villablino         Es obligado recordar aquí al entonces Ministro de Fomento, Don Francisco Cambó, a cuya clarividencia se debe, en gran parte, el desarrollo de toda la actividad minera en Laciana, Babia Alta y la cuenca de Fabero-Sil.  Convencido de la importancia de estos yacimientos y de la repercusión que su explotación podrá tener sobre la economía nacional, actúa en el sentido de facilitar y agilizar la puesta en servicio de una vía férrea sin la cual no habrá rentabilidad posible.
 A este respecto, el Ministro será protagonista de intensos debates en el Congreso y acusado de propiciar un gasto enorme que Cambó sabrá mostrar como insignificante frente a las ventajas que, del mismo, se habrán de derivar.
A Cambó debe León dos realizaciones de importancia capital : la electrificación de la vía férrea por el Puerto de Pajares y la construcción de nuestro ferrocarril. Don Francisco Cambó acude a Laciana, se aloja en “la casona ” de San Miguel y, a lomos de un caballo, recorre e inspecciona las obras del tren. Obras cuya crónica podría tildarse de auténtica epopeya sin temor a la hipérbole.
El trazado, que recorre sesenta y dos kilómetros junto al curso del río Sil, es cubierto en el asombroso plazo de once meses, cumpliendo de este modo unas muy duras especificaciones a cuyo rigor se suma, fatalmente, una trágica epidemia de gripe que causa gran mortandad.
Hay meses en que el número de obreros llega a 4.800 y temporadas, como a mediados del otoño, en que la cifra baja a 1.200 porque muchos de ellos abandonan a causa de la peste. La concesión para la construcción de la vía férrea se lleva a cabo de modo directo y simplificando los trámites de expropiación. Se estipula un premio de diez mil pesetas por cada jornada de adelanto e idéntica suma, como penalización, por cada día de retraso.
Los trabajos llegan a su término en la ,fecha prevista lo que, dados los medios mecánicos de la época y multitud de circunstancias adversas que no hemos referido, supone un acontecimiento de amplia repercusión. Seguidamente se construyen los ramales a Villaseca (zona este) y Caboalles de Arriba (zona oeste). A partir ,de la puesta en servicio, la producción de la cuenca de Laciana se incrementa de modo espectacular.
Minero Siderúrgica de Ponferrada comienza sus actividades de extracción logrando un tonelaje que ronda la cifra de 200.000 en el año 1920. En 1929 alcanza una producción de 390.000 Tm. En 1942, llega a las 650.000 toneladas. En 1977 sobrepasa las 950.000 y, en 1982, alcanza la cota de los 2.100.000 toneladas incluyendo la producción de la mina “La Camocha” de Gijón. (Memoria de MSP de 1982).   No podemos poner aquí un punto y aparte sin aludir, siquiera sea de pasada, a una figura de importancia capital en el desarrollo de la que ha llegado a ser primera potencia minera privada de nuestro país. Nos referimos a D. Marcelo Jorissen Braecke cuyo sobre nombre de “el belga ” es, cuando menos, demasiado pobre.
 El Sr. Jorissen ya posee la nacionalidad española cuando, muy joven aún, inicia aquí sus estudios superiores. En el año 1921 llega a Laciana como ingeniero de zona de la Minero Siderúrgica de Ponferrada. Poco tiempo -Después accede al cargo de Director Técnico en la empresa de la que habrá de convertirse en auténtico motor. En la actualidad (1986) es Vicepresidente de su Consejo de Administración y tiene tras de sí cincuenta años de actividad dentro de la firma: toda la historia de la misma. Y, paralelamente, ha llevado acabo una labor docente en la Universidad, de no menor trascendencia.